Las personas que comparten su vida con perros suelen detectar un hábito curioso: a sus mascotas les gusta acurrucarse sobre la ropa, ya sea una camiseta, un pantalón o prendas dejadas casualmente en la cama o el sofá. Si bien puede parecer simplemente un comportamiento de búsqueda de consuelo, los especialistas en comportamiento animal señalan que esta acción está impulsada por motivos más profundos relacionados con el instinto y el apego emocional.

La explicación más popular es el olor.

La ropa retiene con fuerza el olor de su dueño, lo que le da al perro una sensación de seguridad y compañía. Al recostarse sobre estas prendas, el perro se siente cerca de la persona que ama. Por esta razón, los perros suelen preferir la ropa sin lavar, ya que deja un rastro más intenso de olor corpora

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