- Pelar la granada y quitarle las semillas.
- Lavar los arándanos y el kiwi (pelar el kiwi y cortarlo en rodajas).
- Mezclar la fruta en un bol, rociar ligeramente con jugo de limón y añadir menta fresca.
- Servir inmediatamente: como ensalada, como complemento de la avena o como refrigerio durante el día.
Consejos para servir y almacenar:
- Lo mejor es consumirlo por la mañana o en la primera mitad del día, para aprovechar al máximo la energía natural de la fruta.
- No guardes la mezcla demasiado tiempo. Es mejor consumirla entre una y dos horas después de prepararla.
- Puedes empacar una porción en un recipiente hermético y llevarla contigo al trabajo o la escuela.
Variantes:
- Puedes sustituir la granada por naranja sanguina o frambuesas.
- Puedes sustituir el kiwi por piña o mango, que también tienen propiedades antiinflamatorias.
- Añade una cucharadita de semillas de chía o de lino para una mejor digestión y sensación de saciedad.
Preguntas frecuentes:
- ¿Comer solo tres porciones de fruta al día realmente marca la diferencia? ¡
Por supuesto! Estas frutas aportan una gran cantidad de antioxidantes, fibra y vitaminas que fortalecen el sistema inmunitario, el corazón y el cerebro. - ¿Se pueden comer a diario?
Sí, la clave está en la variedad y la regularidad. Estas frutas son seguras, incluso consumidas a diario. - ¿La fruta ayuda a bajar de peso?
Sí, porque contiene fibra y azúcares naturales, que te hacen sentir lleno y reducen los antojos de dulces. - ¿Puede la fruta sustituir a los suplementos nutricionales?
En muchos casos, sí: la naturaleza proporciona vitaminas y minerales en su forma más asimilable.