Bien amueblado, el balcón se transforma rápidamente en un pequeño paraíso, lejos del ruido exterior. Y si tienes mano para la jardinería, puedes crear tu propio huerto buscando un pequeño rincón en el balcón. Práctico y estético, sin embargo, tu balcón puede verse infestado y dañado por ciertos parásitos que no dudan en dejar sus excrementos allí. Verás, estamos hablando de palomas de ciudad.
Mantenlas alejadas del balcón con papel de aluminio .
Invasoras, indeseadas, dañinas… Así se percibe a las palomas hoy en día. Considerada el ave urbana por excelencia, la paloma ha adquirido mala fama en entornos urbanos. Por eso, no es casualidad que se la apode “rata voladora”. No es de extrañar que, como vector de numerosas enfermedades, esta ave represente un cierto riesgo para la salud humana, por no mencionar los sonidos y olores que puede producir o emitir: arrullos, aleteo y excrementos, entre otros. ¡Y eso no es todo! De hecho, la paloma es un ave que le gusta posarse en casi cualquier lugar, si se le da la oportunidad. Balcones, terrazas, alféizares; ningún lugar está exento, incluidos los balcones. Encontrar un balcón cubierto de excrementos es una auténtica pesadilla, sobre todo si quieres sentarte allí de vez en cuando y respirar aire fresco. Ahora te enfrentas a una rutina tan restrictiva como desagradable: limpiar el balcón después de cada migración de palomas. No te preocupes, ya no tienes que soportar estos inconvenientes, porque hay un truco que puedes usar para mantener a las palomas alejadas de la barandilla de tu balcón para siempre: papel de aluminio.
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