Cuando la base se haya enfriado, córtala con cuidado horizontalmente en dos capas iguales. Puedes hacerlo con un cuchillo afilado para obtener capas uniformes. Aplica un poco de crema sobre la primera capa y extiéndela uniformemente. Luego, coloca la segunda capa y cúbrela de nuevo con crema. Espolvorea el pastel con coco rallado para darle una textura y un aroma especiales. También puedes espolvorear el pastel con azúcar glas para un efecto visual y un dulzor adicionales. Derrite el chocolate blanco y cocínalo al vapor. Luego, vierte el chocolate derretido sobre la capa superior de crema. Deja que el chocolate se endurezca y el pastel estará listo para comer.