Los científicos han descubierto que bloquear ciertas interacciones entre PKMzeta y KIBRA puede borrar recuerdos específicos en animales. Imagínese lo que esto significa: ¿podríamos algún día suprimir recuerdos traumáticos o potenciar los útiles?
Los experimentos también demuestran que ciertas actividades, como jugar al Tetris después de un suceso traumático, pueden reducir la persistencia de recuerdos desagradables. Este enfoque podría utilizarse para prevenir el trastorno de estrés postraumático.
Un fascinante viaje al corazón de la memoria
Nuestra memoria es más que un simple almacén de información. Es un proceso dinámico en constante evolución que depende de muchos factores, desde las moléculas cerebrales hasta las fases del sueño, así como de nuestro entorno y nuestras emociones.
Al comprender mejor estos mecanismos, abrimos la puerta a avances increíbles: mejorar la memoria, tratar trastornos cognitivos e incluso modular ciertos recuerdos. ¿Y quién sabe? Quizás algún día podamos elegir qué recuerdos conservar y cuáles dejar desvanecer…