Alivio de los síntomas de los cálculos amigdalinos (9/11)
Hacer gárgaras con agua tibia con sal puede aliviar la inflamación y eliminar las bacterias responsables de las piedras en las amígdalas.

Extracción manual del caseum (10/11)
La extracción manual de los cálculos amigdalinos con un hisopo de algodón es posible, pero conlleva riesgos; lo mejor es dejar esta tarea en manos de un profesional.

Amigdalectomía en caso de caseum recalcitrante (11/11)
Como último recurso, puede ser necesaria una amigdalectomía si el caseum se vuelve demasiado invasivo y resistente al tratamiento.