¿Estás perdiendo peso sin motivo aparente? Si no has cambiado tu dieta ni has empezado a hacer ejercicio, podría ser un síntoma de una afección subyacente, incluido el cáncer de páncreas.
2. Ictericia repentina
¿Tu piel o la esclerótica de tus ojos se están poniendo amarillas? Esto podría deberse a una acumulación de bilirrubina, un signo de congestión hepática… y el páncreas podría ser el responsable.
3. Dolor abdominal persistente
¿Siente molestias o dolor abdominal, a veces irradiado a la espalda, especialmente después de las comidas? Este síntoma común del cáncer de páncreas puede confundirse con problemas digestivos, pero si persiste, lo mejor es consultar a un médico.
4. Problemas digestivos inusuales
Hinchazón, diarrea, indigestión frecuente… El páncreas produce enzimas digestivas esenciales. Si su producción se ve afectada, el sistema digestivo enviará señales de alerta.
5. Aparición repentina de diabetes
Un diagnóstico reciente de diabetes, especialmente sin antecedentes familiares, puede ser una señal temprana. Dado que el páncreas es el órgano responsable de producir insulina, el cáncer puede alterar este proceso.
6. Heces inusuales
Las heces pálidas, grasosas o flotantes pueden indicar que el páncreas no está produciendo suficientes enzimas digestivas. ¡Este es un síntoma que no debe ignorarse!
7. Fatiga intensa e inexplicable
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